Mis Manías
Es un misterio de la vida: ¿por qué siempre tengo que ordenar mi habitación antes de estudiar? Es como si mi cerebro tuviera la teoría de que, para que pueda aprender sobre cualquier tema, primero debo ordenar todo mi cuarto. O sea, ¿cómo voy a concentrarme con la cama sin hacer? ¡Eso me va a distraer! Entonces, comienzo el ritual: empiezo a recoger un poco por aquí, un poco por allá… Después de un rato, el cuarto está como nuevo, pero mis ganas de estudiar ya han desaparecido. Ahora lo único que quiero hacer es sentarme y darme un descanso. Total, ya he logrado algo: mi habitación está tan ordenada que podría pasar por la de una persona altamente organizada… Es entonces cuando puedo ponerme a estudiar o hacer lo que tenga que hacer de clase ese día.